FICHA TÉCNICA
Título: Los Juegos del Hambre
Serie: Los Juegos del Hambre #1
Serie: Los Juegos del Hambre #1
Autor: Suzanne Collins
Páginas: 402
Precio: $245
Edición: Rústica
Editorial: Molino
ISBN: 9788492955299
SINOPSIS
Ganar significa fama y fortuna. Perder significa una muerte segura. Los Juegos del Hambre han comenzado...
Un pasado de guerras ha dejado los 12 distritos que dividen Panem bajo el poder tiránico del “Capitolio”. Sin libertad y en la pobreza, nadie puede salir de los límites de su distrito.
Sólo una chica de 16 años, Katniss Everdeen, osa desafiar las normas para conseguir comida. Sus principios se pondrán a prueba con “Los Juegos del Hambre”, espectáculo televisado que el Capitolio organiza para humillar a la población. Cada año, 2 representantes de cada distrito serán obligados a subsistir en un medio hostil y luchar a muerte entre ellos hasta que quede un solo superviviente.
Cuando su hermana pequeña es elegida para participar, Katniss no duda en ocupar su lugar, decidida a demostrar con su actitud firme y decidida, que aún en las situaciones más desesperadas hay lugar para el amor y el respeto.
Un pasado de guerras ha dejado los 12 distritos que dividen Panem bajo el poder tiránico del “Capitolio”. Sin libertad y en la pobreza, nadie puede salir de los límites de su distrito.
Sólo una chica de 16 años, Katniss Everdeen, osa desafiar las normas para conseguir comida. Sus principios se pondrán a prueba con “Los Juegos del Hambre”, espectáculo televisado que el Capitolio organiza para humillar a la población. Cada año, 2 representantes de cada distrito serán obligados a subsistir en un medio hostil y luchar a muerte entre ellos hasta que quede un solo superviviente.
Cuando su hermana pequeña es elegida para participar, Katniss no duda en ocupar su lugar, decidida a demostrar con su actitud firme y decidida, que aún en las situaciones más desesperadas hay lugar para el amor y el respeto.
MI OPINIÓN
Hacía mucho que me venían diciendo que tenía que leer este libro. Lo puse en mi lista de lectura de este año, pero no hacía más que patearlo para más adelante. Como la primera parte de la última película se estrena en noviembre de este año, decidí leer la trilogía de una buena vez. Ante todo, les voy a dejar una pequeña introducción al contexto social en el que la historia se desarrolla. Se trata de un futuro post-apocalíptico en el que Norteamérica se convirtió en Panem. En principio eran 13 distritos que eran gobernados por el Capitolio, sin embargo las personas de dichos distritos llegaron al punto de rebelarse en contra de sus gobernantes. Eso dio lugar a una guerra donde destruyeron el 13er distrito, y quedaron todos los demás a disposición del Capitolio. La mayoría está en la pobreza, y tienen reglas muy estrictas en cuanto a cómo ganarse la vida. Como castigo por su rebelión, el Capitolio emite todos los años una especie de reality, Los Juegos del Hambre, donde seleccionan dos chicos de entre doce y dieciocho años de cada distrito -un hombre y una mujer- como tributos y los envían a pelear hasta la muerte. El ganador se asegura una vida libre de hambruna y la prosperidad de su familia.
Bien, ahora que ya les comenté un poco cómo viene la cosa, paso a detallar algunos personajes.
Katniss Everdeen es nuestra aclamada protagonista. Tengo emociones encontradas con ella. Por una parte me parece uno de los personajes femeninos más duros y fuertes que he tenido el gusto de leer. Su vida no ha sido sencilla, y sabe cuánto cuesta salir adelante. Es una luchadora. Conoce los bosques, sabe cazar e incluso tiene conocimientos sobre algunas plantas curativas que le son útiles al momento de estar en la arena. Me gusta que sea impetuosa y que no permita que nadie modifique su forma de pensar. Hasta ahí llegó mi amor. Katniss a veces es demasiado insufrible y desconfiada. Comprendo su perspectiva, teniendo en cuenta que se encuentra en un lugar donde las otras veintitrés personas quieren matarte. Lo sé y lo comprendo, pero a veces era como una bestia salvaje que se te arroja a la yugular. No me malinterpreten, me agrada, pero creo que debería relajarse un poco en lo que a sus actitudes con las otras personas se refiere. ¿En el estadio? Sin duda es admirable.
Peeta Mellark. Él es un chico sencillo y buenazo del Distrito 12. Este personaje me gustó mucho, aunque tampoco es que llegó a enamorarme. Es amable, sincero y dulce. También tiene cierta personalidad que no se logra explotar al máximo. Es fuerte, aunque no se tome en serio, y tiene muy buena mano para el camuflaje. Algunas de sus frases fueron excelentes, y sabe muy bien cómo ganarse al público. Si me lo preguntan, creo que es uno de los personajes más nobles que ha aparecido hasta el momento.
Gale Hawthorne. Es la antítesis de Peeta. Es el mejor amigo de Katniss, y se parecen bastante. Fuerte, decidido, sufrido y luchador. Es tan buen cazador como la protagonista, y la ayuda en todo lo que le es posible. Al igual que Katniss, es el sustento de su familia. Es tan responsable como ella. Físicamente incluso se parecen. Este personaje no aparece mucho en el libro por razones obvias.
Haymitch Abernathy. Él es el único ganador de los juegos que ha tenido el Distrito 12, y al mismo tiempo el mentor de Katniss y Peeta. No parece tomarse nada en serio, y tiene un grave problema con el alcohol. Sus consejos a veces suelen ser ridículos, teniendo en cuenta las circunstancias, aunque hay momentos en que le da importancia a su trabajo para buscar patrocinadores para los chicos.
Effie Trinket. Ella es la escolta de los tributos del Distrito 12. Para ser honesta, es muy superficial y repara en cosas que a nadie le interesan. Dado que está acostumbrada a la vida en el Capitolio, no toma en cuenta lo que el resto de la gente tiene que pasar. Hace hincapié en los buenos modales en la mesa, el protocolo, y en absolutamente siempre estar en actitud positiva. Sin importar las circunstancias, ella trata de alegrar a sus tributos. A pesar de algunos de sus comentarios desagradables o desafortunados, Effie no es mala. Por el contrario, intenta sacar el mayor provecho de las cosas.
Primrose Everdeen. Es la única hermana de Katniss. Tiene doce años, lo que la hace entrar en la Cosecha. Tiene tanta mala suerte de ser elegida, y es por eso que su hermana se ofrece como voluntaria para reemplazarla. Prim es lo que Katniss ama más que nada en el mundo. Es una chica muy dulce y tímida. Tiene conocimientos de sanación, una cabra llamada Lady, y un gato que su hermana aborrece llamado Buttercup. Físicamente es muy distinta a su hermana, e incluso sus personalidades difieren bastante. Lo que sí se puede afirmar, es que se adoran.
Bueno, el resto de los personajes son también interesantes. Ya sean los demás tributos, cada uno con sus particularidades y detalles, o los miembros del Capitolio con sus cientos de excentricidades. Cabe destacar a Rue, la tributo del Distrito 11 y a Cinna, el estilista de Katniss. Esos personajes fueron geniales. El Presidente Snow me pareció un hipócrita petulante, tal como todos y cada uno de los políticos. Tienen la mentira en la punta de la lengua y sólo les importan las apariencias. Caesar Flickerman, a pesar de ser tan excéntrico como los demás, me cayó bastante bien. Siempre intentó ayudar a los tributos desde su lugar, hacerlos brillar. La madre de Katniss no se ganó mi cariño, al menos no en este libro. Creo que su actitud, por lo que cuenta la protagonista, fue de mala madre.
En cuanto a la historia, admito que me gustó. No me encandiló, ni quedé fascinada, pero me gustó. Algunas partes fueron muy bien narradas, aunque tengo que decir algo: odio los libros que están escritos en presente. No tengo nada en contra de la autora, pero sencillamente no me gustan. De todos modos, la historia en sí es bastante buena. Me agradó que explicara algunas cosas que de otra forma no habría entendido, y que en las películas no se aclaran. La historia es original, y bien planteada. Sí digo que hubo demasiado abuso de palabras. A veces se reiteraban tanto los mismos conceptos, que me hartaba. Pero, resumiendo, me gustó.
FRASES
No quedó nada de él que pudiéramos enterrar. Yo tenía once años; cinco años después, muchas noches me sigo despertando gritándole que corra.
Intento perdonarla por mi padre, pero, para ser sincera, no soy de las que perdonan.
Protejo a Prim de todas las formas que me es posible, pero nada puedo hacer contra la cosecha.
Da igual las palabras que utilicen, porque el verdadero mensaje queda claro: «Miren cómo nos llevamos a sus hijos y los sacrificamos sin que puedan hacer nada al respecto. Si levantan un solo dedo, los destrozaremos a todos, igual que hicimos con el Distrito 13».
Effie Trinket vuelve al podio, alisa el trozo de papel y lee el nombre con voz clara; y no soy yo.
Es Primrose Everdeen.
—No es como cazar, Gale, están armados. Y piensan.
—Igual que tú, y tú tienes más práctica, práctica de verdad. Sabes cómo matar.
—Pero no personas.
— ¿De verdad hay tanta diferencia? —pregunta Gale, en tono triste.
Ya está luchando por seguir vivo, lo que significa, además, que el bueno de Peeta Mellark, el chico que me dio el pan, está luchando por matarme.
Cinna me ha dado una gran ventaja, nadie me olvidará. Ni mi aspecto, ni mi nombre: Katniss, la chica en llamas.
Quizá la chica no se acuerde de mí, aunque sé que me engaño: no se te olvida la cara de la persona que era tu última esperanza.
—No lo entiende—dice Peeta, dirigiéndose a Haymitch y poniendo los ojos en blanco—. No entiende el efecto que ejerce en los demás.
Había momentos en el bosque, con Gale, en los que era realmente... feliz.
No soy guapa. No soy bella. Resplandezco como el sol.
—Creo que no funcionaría. Ganar... no ayudará, en mi caso.
—¿Por qué no? —pregunta Caesar, perplejo.
—Porque... —empieza a balbucear Peeta, ruborizándose—. Porque... ella está aquí conmigo.
Pobre pareja trágica.
Sin embargo, yo sé la verdad.
Este incendio está diseñado para juntarnos, para que nos encontremos. Aunque puede que no sea el dispositivo más original que haya visto, es muy, muy eficaz.
«Si los profesionales me quieren, que me encuentren -pienso antes de quedarme dormida-. Que me encuentren.»
Y vaya que si me encuentran.
Enferma y desorientada, sólo se me ocurre una cosa: «Peeta Mellark me acaba de salvar la vida».
Por primera vez, me doy cuenta de lo sola que me he sentido desde que llegué al campo de batalla, de lo reconfortante que puede ser la presencia de otro ser humano.
Rue, la niña que, cuando le preguntas por lo que más ama en el mundo, contesta que la música, nada más y nada menos.
Mis pies me llevan por donde quieren hasta que se pone el sol, y yo no tengo miedo, ni siquiera estoy alerta, lo que me convierte en una presa fácil, salvo por el detalle de que mataría a cualquiera que se me pusiera delante. Sin emoción y sin que me temblasen las manos.
—No, de verdad. Y, justo cuando terminó la canción, lo supe: estaba perdido, igual que tu madre.
—Bueno, aquí no tengo mucha competencia.
—No tienes mucha competencia en ninguna parte.
—Entonces, ¿ni siquiera te has fijado en las otras chicas desde que teníamos cinco años?
—Me fijaba en casi todas, pero tú eras la única que me dejaba huella.
—Entonces, ahora que me tienes, ¿qué vas a hacer conmigo?
—Ponerte en algún sitio en el que no puedan hacerte daño.
— ¿Una última vez? ¿Para la audiencia? —me dice, no en tono enfadado, sino hueco, lo que es mucho peor.
A mi me gusto bastante ésta historia, la había estado posponiendo por meses y el mes pasado por fin termine la trilogía.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu reseña, un saludo enorme...