Sinopsis
Tras pasar dos años en Nueva York, Step regresa a Roma. El recuerdo de Babi lo ha acompañado todo este tiempo, pero pronto se da cuenta de que las cosas han cambiado y de que deberá reconstruir su vida en Italia: hacer nuevos amigos, conseguir un empleo, empezar una nueva etapa...
Cuando conoce a Gin, una chica alegre y preciosa, cree que podrá volver a enamorarse. Pero no es fácil olvidar a Babi, y cuando, por casualidad, tropieza con ella, siente que su mundo se tambalea.
¿Es posible revivir la magia del primer amor?
En Tengo ganas de ti, la esperada segunda parte de A tres metros sobre el cielo, Federico Moccia nos cautiva con una deliciosa novela sobre deseos, amor y sueños.
El <<fenómeno Moccia>> continúa: miles de jóvenes italianos imitan una escena del libro y cuelgan en el puente Milvio candados con sus nombres. Son los candados del amor, un maravilloso ejemplo de cómo la realidad emula a la ficción.
Mi opinión
Tengo que decirlo: este libro me gustó mucho más que el primero. Me hizo reír a mares, llorar, soñar, y enamorarme -una vez más- de Step. Fue maravilloso. Reconozco que deseaba más las apariciones de Babi, porque creí que era eso lo que iba a ocurrir; sin embargo, Gin es una chica especial. Sin lugar a dudas, es la versión femenina de Step. Divertida, valiente, tozuda, preciosa, y con un gran corazón. Es increíble el cambio que esos 'dos años' en el exterior provocan en Step. Ha madurado al punto de darse cuenta que muchas cosas que él antes consideraba normales, ahora le parecen innecesarias. Se ha vuelto un hombre más centrado. Gin, por su parte, es lanzada en algunas cuestiones pero también sumamente vulnerable e ingenua. Babi ha cambiado, también. Si bien no aparece mucho en el libro, las pocas veces que lo hace se la ve más madura. Incluso más fría. Ya no es la chica locamente enamorada que era capaz de hacer cualquier cosa. En algún punto, me molestó su actitud a lo largo del libro. Es como si esa chica que habíamos conocido en A tres metros sobre el cielo, ya no existiera. Fue triste.
En Tengo ganas de ti, también se ven las historias de otros personajes que conocimos en el primer libro. Se cuenta lo que ocurre con los padres de Babi, con su hermana, e incluso también se la muestra a Pallina. Imposible no amarla, por supuesto. Ese personaje lo quise antes, y lo amé aún más ahora. Hay violencia, sentimentalismo, sexo más explícito, y escenas muy hermosas. Desde ya, quiero ir a Roma y poner mi candado. :) Sería maravilloso un amor así.
Si leyeron el primer libro, no se pueden perder el segundo. ¡Lo recomiendo!
Frases
En la vida siempre buscamos explicaciones. Perdemos el tiempo buscando un por qué. Pero a veces no existe. Y por triste que parezca, ésa es precisamente la explicación.
Y después, algo aún peor. No sólo arrogarse el derecho a perdonar, sino no saber siquiera hacerlo.
Sólo adviertes la maravilla del amor cuando ya lo has perdido.
No hay nada peor que quien espera algo... y no encuentra nada.
El amor, en cambio, es cuando no respiras, cuando es absurdo, cuando echas de menos, cuando es bonito aunque esté desafinado, cuando es locura... Cuando sólo de pensar en verla con otro cruzarías a nado el océano.
Antes o después las cosas que has dejado atrás te alcanzan.
Aunque hay que reconocer que la verdad sobre el amor se demuestra con el tiempo. Al principio todo te parece agradable. Después, cuando la historia arranca, lo que parecía agradable puede volverse bonito, incluso eternamente bonito... Pero la mayoría de las veces degenera y acaba siendo un espanto.
—A veces hacemos cosas estúpidas. Y no precisamente cuando estamos enamoradas, sino cuando creemos estarlo.
—Me equivoqué, es verdad, y el Señor quiso que precisamente lo descubrieras tú. Pero ha sido un castigo demasiado grande. Perder por ese error a mi hijo.
(...)
—No me has perdido: estoy aquí.
¿Y ella? Ella me perdona. ¿El qué? ¿no haber sabido olvidarla?
Su risa. La risa de la que he añorado, de la que he buscado, de ella, que ha sido mi sueño de mil noches. Babi.
Un beso lo es todo. Un beso es la verdad.
Es perfecta, coño, es perfecta, lo sé. Pequeños cosquilleos... No sé qué sentido tienen..., pero en realidad... Sí lo sé.
—Step, tengo ganas de ti...
Mía... Para siempre mía. Para siempre mía. No me lo puedo creer.
—Entonces hemos escrito un fragmento de historia..., la nuestra.
Me pega otra vez. Pero es un instante. Luego nos perdemos entre las sábanas frescas que huelen a mar. Y hacemos el amor, follando.
—Es verdad, es tremenda. Y es mía.
Por primera vez unos padres imaginan que su hija está segura a mi lado.
—Gin...
—¿Si?
—No me dejes...
Calificación
Ahora les voy a dejar esto, porque verdaderamente lo amé. ♥
Poema de Gin a Step
Step. Siempre he tenido ganas de ti.
Tengo ganas de ti.
Por todo lo que he imaginado, soñado, deseado.
Tengo ganas de ti.
Por lo que sé y aún más por lo que no sé.
Tengo ganas de ti.
Por ese beso que aún no te he dado.
Tengo ganas de ti.
Por el amor que nunca he hecho.
Tengo ganas de ti aunque nunca te he probado.
Tengo ganas de ti, de ti entero.
De tus errores, de tus éxitos, de tus equivocaciones, de tus dolores, de tus simples incertidumbres, de los pensamientos que has tenido y de los que espero que hayas olvidado, de los pensamientos que aún no tienes.
Tengo ganas de ti.
Tengo tantas ganas de ti que nada me basta.
Tengo ganas de ti y no sé ni siquiera por qué.
Uf. TENGO GANAS DE TI.